martes, 23 de febrero de 2010
lunes, 15 de febrero de 2010
domingo, 14 de febrero de 2010
Cambiar un Foco...
¿Sabes cuantos estudiantes se necesitan para cambiar un foco?
Dale clic al logo de cada institución para saber cuantos estudiantes se necesitan:
Si tu Alma Mater no aparece en esta lista, espera pacientemente las actualizaciones...
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...iluso.
miércoles, 10 de febrero de 2010
sábado, 6 de febrero de 2010
Peliculas
Se vienen los premios de la Académia, y aunque no dudo de la capacidad intelectual y de el buen juicio libre de intereses economicos y/o taquilleros de los señores que integran la comision de selección de los grupos que conformaran a los nominados, quisiera desde aqui, mi humilde palco, hacer algunas sugerencias para la nominación a "Mejor Pelicula Extranjera", por supuesto todas ellas mexicanas: (Como siempre, hacer clic para ver la imagen mas grande)
viernes, 5 de febrero de 2010
Paris...
orgasmo.
1. m. Culminación del placer sexual.
2. m. Exaltación de la vitalidad de un órgano.
Esa es la definición de orgasmo según el Diccionario de la Real Academia Española, sin embargo es difícil explicar esa definición de una manera estrictamente textual.
En una relación el orgasmo es el climax del sexo, el objetivo final, la cumbre de una escalada de sensaciones físicas causadas por la pasión, los sentidos, la imaginación, las palabras. Sin embargo, aunque suene tan sencillo, a veces es complicado alcanzarlo, sobre todo en ellas, que son tan complicadas y dependen de la cantidad exacta de cada uno de los elementos que les permiten llegar ese punto, (aceptemoslo los hombres somos mas animales y necesitamos mucho menos estimulación).
Sin embargo el sexo no debe ser una carrera a la inversa, no es "a ver quien llega al final", el orgasmo no es una meta.
Mas bien yo haría una analogía entre el sexo y París, en donde el orgasmo vendría a ser la torre Effiel; cualquiera pensaría: "¿Que caso tiene ir a París y no visitar la torre Eiffel?", bueno, pues para aquella persona que piense eso, dejenme les digo que en París podemos visitar el Musé de Louvre, en donde hay tantas galerías para observar magnificas obras de arte que te llevaría días enteros recorrerlo por completo.
En el Jardin des Tuileries uno puede cerrar los ojos para percibir cada olor proveniente de los ciruelos, las petunias, las gardenias, imaginar cada paso que uno da entre el laberinto de arbustos. En la Île de la cité frente a Notre Dame, es fácil encontrar músicos callejeros tocando magnificas piezas de jazz; escuchar algún bandoleon, o un sax con melancólicas melodías al atardecer frente a la fachada una de las catedrales mas famosas del mundo, es una experiencia única.
Pasando por el Barrio Latino, en la zona de Clunny entre las callejuelas que atraviesan el Boulevard de Saint Michel podemos encontrar infinidad de puestos callejeros y establecidos para saborear un Quiche, o una selección de Charcuterie o el clásico Croisaint de queso y jamón. De lado a lado de la ciudad puedes navegar por el Senna, y sentir la brisa de los nublados días parisinos.
En fin, París es un lugar mágico, en donde el aburrimiento no es una opción, pero aún y si con este europeo eufemismo no entiendes a lo que me refiero, te dejo un metáfora final:
En un buen día, desde cualquier punto de París...
En una relación el orgasmo es el climax del sexo, el objetivo final, la cumbre de una escalada de sensaciones físicas causadas por la pasión, los sentidos, la imaginación, las palabras. Sin embargo, aunque suene tan sencillo, a veces es complicado alcanzarlo, sobre todo en ellas, que son tan complicadas y dependen de la cantidad exacta de cada uno de los elementos que les permiten llegar ese punto, (aceptemoslo los hombres somos mas animales y necesitamos mucho menos estimulación).
Sin embargo el sexo no debe ser una carrera a la inversa, no es "a ver quien llega al final", el orgasmo no es una meta.
Mas bien yo haría una analogía entre el sexo y París, en donde el orgasmo vendría a ser la torre Effiel; cualquiera pensaría: "¿Que caso tiene ir a París y no visitar la torre Eiffel?", bueno, pues para aquella persona que piense eso, dejenme les digo que en París podemos visitar el Musé de Louvre, en donde hay tantas galerías para observar magnificas obras de arte que te llevaría días enteros recorrerlo por completo.
En el Jardin des Tuileries uno puede cerrar los ojos para percibir cada olor proveniente de los ciruelos, las petunias, las gardenias, imaginar cada paso que uno da entre el laberinto de arbustos. En la Île de la cité frente a Notre Dame, es fácil encontrar músicos callejeros tocando magnificas piezas de jazz; escuchar algún bandoleon, o un sax con melancólicas melodías al atardecer frente a la fachada una de las catedrales mas famosas del mundo, es una experiencia única.
Pasando por el Barrio Latino, en la zona de Clunny entre las callejuelas que atraviesan el Boulevard de Saint Michel podemos encontrar infinidad de puestos callejeros y establecidos para saborear un Quiche, o una selección de Charcuterie o el clásico Croisaint de queso y jamón. De lado a lado de la ciudad puedes navegar por el Senna, y sentir la brisa de los nublados días parisinos.
En fin, París es un lugar mágico, en donde el aburrimiento no es una opción, pero aún y si con este europeo eufemismo no entiendes a lo que me refiero, te dejo un metáfora final:
En un buen día, desde cualquier punto de París...
...se ve la torre Eiffel.
chanceux et, au revoir!
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